Diseña un sitio como este con WordPress.com
Comenzar

Confinamientes.

Parece que estamos encerrados, también parece que no nos gusta. Y todo se queda ahí, en lo que parece y no en lo que es. Viva el tiempo en el que la apariencia importa más que la esencia.

Nos pasamos la vida disparando respuestas en automático a las preguntas que nos plantea un tercero, a veces incluso a las que nos hacemos nosotros frente al espejo. Si bien nos va.

Y las respuestas, no hacen más que evitar el tema. Cuando tenga tiempo. Ando de arriba para abajo. Primero lo que deja, después lo que apendeja, diría casi cualquiera de mis abuelos.

La cantidad de trabajo siempre nos ha servido para acomodarnos el moño de la corbata y hacernos los interesantes bajo una cara de preocupación, pero también como pretexto ideal para justificar nuestros miedos.

Pretextos que nos sirven como justificante ante la imperiosa necesidad de ser nosotros mismos, es el deténganme que lo mato, de los fanfarrones. Esos que cuando sueltas no hacen más que seguir pidiendo que los detengan sin moverse de su lugar.

Siempre hemos sido buenos para usar los pretextos como escudos, como máscaras o lentes oscuros. Algunos incluso traen un buen pretexto bajo la manga.

Y en una de esas, llega un momento en el que nos desnudamos el día entero. Que nos levantamos tarde porque no hay que andar corriendo. Que tomamos juntas en bermudas, en pijama o en calzones y en la cama, todo depende del clima. Llega el día en el que sin querer o con toda la intención, hacemos una pausa y nos da por preguntarnos si de verdad hacemos lo que queremos. Porque para mí no vale eso de querer lo que hacemos sin siquiera haber intentado lo primero.

Hoy que tenemos tiempo, los pretextos se nos caen de los bolsillos.

Ahora que podemos, quién o qué nos detendrá para no hacerlo, para no poder hacer lo que siempre hemos querido y que, como consecuencia de poder elegir el camino correcto, nos da miedo. Llegar ahí, a ese lugar en el que no podemos hacer check in en ninguna red social. Donde podemos ser, en lugar de solamente decir que estuvimos.

Y algunos dirán que lo que pasa es que no saben cómo empezar y para eso siempre hay alguien que escribió alguna vez en un libro, “la mejor forma de empezar cuando no se sabe cómo, es simplemente hacerlo”. Empezando. Haciendo. En gerundio que se nos acaba el tiempo.

Empieza por dónde sea, de la forma que sea. No siempre hay recetas y cuando las hay, tenemos que ponerle una pizca de nosotros para hacerla nuestra. Ahí está el chiste, en eso radica la originalidad, construimos sobre hombros de gigantes, sí, pero eso no nos quita ningún mérito.

Porque usar pretextos para no ser, es encerrarse en uno mismo, para no vivir jamás.

Resulta que nos quejamos de estar encerrados, como si lleváramos solamente tres meses de confinamiento. Me da por pensar que ya llevamos algunos años.

La cuarentena es peor, cuando no son las paredes las que te limitan, ni la puerta es la que te detiene. Es peor cuando sufrimos una cuarentena existencial y decidimos quedarnos adentro, dejar de ser nosotros mismos para poder ser lo que otros esperan. Lo que estaba dictado. Lo que seguía porque así es la vida. Guiados por la inercia. Y una mierda.

Encierra más una mentira que cuatro paredes.

Por eso hoy es el momento ideal para empezar algo, lo que sea. Un negocio, un nuevo pasatiempo, eso que siempre dijiste querer. Tal vez hoy que parece que todo acaba, es el mejor momento para empezar a llevar la contraria.

Empezando es como te puedes dar cuenta de dos cosas, la primera que realmente nunca quisiste lo que dijiste querer. La segunda, que lo que podría estarte deteniendo, es el miedo. El miedo que no tiene más que dos funciones, paralizarte o hacer que te muevas y si sientes miedo de empezar algo, sólo es la señal de que estás en el camino correcto.

Hay quienes llevan tres, cuatro meses, otros, llevan años en confinamiento.

 Presiento que no es el confinamiento lo que te enoja, sino que hoy tu encierro se haya vuelto tan evidente.

Y de paso, que haya arrasado con todos tus pretextos.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: